No, no hay colágeno vegano. En un mundo gobernado por suplementos nutricionales, numerosos individuos no han dejado de aprovechar la oportunidad de entrar en el negocio de ganar dinero. En esta situación, han sacado provecho del crecimiento de personas que llevan hábitos de vida vegano para introducir al mercado productos denominados colágeno vegano.
Como se ha observado, no hay colágeno de procedencia vegetal. No obstante, los veganos tienen otras opciones para conseguir el colágeno, aumentando el consumo de alimentos que favorezcan la producción de colágeno.
Colágeno vegano: ¿qué representa y de qué se fabrica?
A pesar de lo que se ha dicho, no hay una fuente vegana natural de colágeno. Esta proteína es totalmente procedente de animales, no obstante, nuestro organismo genera su propio colágeno al consumirla nutrición correcta, y es en este punto donde se presentan los productos de colágenos veganos, afirman algunos estudios.
Por lo tanto, a pesar de que no encuentres colágeno puro de procedencia animal, puedes potenciar tu propia producción interna mediante el uso de ingredientes de procedencia vegetal.

¿En qué consiste el colágeno?
El colágeno es una proteína clave del tejido conectivo, el cual constituye la piel, los músculos, las articulaciones, los huesos o los cartílagos. Representa el 70% de la proteína total en nuestro organismo y el tercio de la composición total del cuerpo humano.
Por lo tanto, nuestro cuerpo genera el colágeno que requerimos mediante nuestra alimentación, por lo que debemos proporcionarle el consumo esencial para ello.
Sin embargo, existen elementos como la edad (entre varios factores), que pueden causar que el colágeno generado no sea adecuado.
El valor de la vitamina C
Como se mencionó previamente, el organismo humano genera colágeno mediante la alimentación. No obstante, este no podría asimilarse sin la vitamina C, por lo que es esencial su ingesta mediante los alimentos.
En realidad, si el colágeno mantiene la estructura de nuestro organismo, la vitamina C es el mecanismo que lo permite operar.
Si el colágeno mantiene la estructura de nuestro organismo, esta vitamina es la responsable de su funcionamiento.
Sin embargo, estos componentes vegetales pueden resultar beneficiosos en diversas áreas.
Dado que la vitamina C, los aminoácidos y los minerales son vitales en diversas áreas del cuerpo para la salud global, los suplementos de colágeno veganos pueden ofrecer un mayor beneficio que los alimentos y productos derivados de colágeno hidrolizado.
Por ejemplo, la vitamina C respalda numerosas funciones celulares del sistema inmunológico y robustece la barrera cutánea al impedir el deterioro ambiental. Además, puede prevenir los impactos inflamatorios que pueden causar los alimentos derivados de animales en el organismo.
Aunque no ingieras de manera directa el colágeno, puedes suministrarle a tu cuerpo elementos como son los nutrientes necesarios que lo producen. Igual sugieren los especialistas, que aconsejan la ingesta de productos con mucha vitamina C. El kiwi, los pimientos rojos, cítricos y fresas los recomiendan consumir.
Entre otros alimentos también sugieren, los ricos en glicina, prolina y lisina, como la soja, las almendras y las legumbresy otras semillas.
Así como también que, el consumir alimentos con alto contenido de antioxidantes nos protege la piel y favorece la salud del colágeno natural.
Recordemos que, los alimentos veganos solo conforman unos bloques de construcción de colágeno, no proporcionan colágeno al 100% a nuestro cuerpo, lo que permite que nuestro organismo lo produzca de manera natural.

Mantener buenos hábitos saludables
Entonces, podemos asegurar que el mantener el consumo equilibrado con dieta rica en nutrientes esenciales que, en conjunto con hacer ejercicio, buena hidratación y controlar el consumo de azucares, los veganos pueden mantener buen contenido de colágeno en su cuerpo.
Podemos asegurar que entre los alimentos ricos en vitamina C se encuentran los cítricos, las bayas, el ajo, la col rizada, los pimientos, la papaya, los tomates, el brócoli, las coles de Bruselas y las fresas.
Asimismo, aquellos alimentos ricos en zinc, cobre y silicio son esenciales dentro una alimentación balanceada como hábito saludable, se encuentran presentes en alimentos como las semillas de calabaza, cacao, semillas de sésamo, espinacas, almendras, anacardos, garbanzos, avena y lentejas.
Las ventajas del colágeno
En resumen, podemos apreciar algunas de las ventajas del colágeno y por qué es tan relevante.
• Mejora la condición de las articulaciones
• Contribuye a mantener un cabello, piel y uñas más robustas y saludables
• Salvaguarda el bienestar cardiovascular
• Perfecciona los procesos digestivos
• Eleva el metabolismo.
A pesar de que la filosofía de tratar la piel desde el interior solo se aplica al colágeno vegano consumido, también puede presentar beneficios su uso tópico. Es crucial comprender la diferencia entre los suplementos de colágeno vegetal (que se consumen oralmente) y el colágeno vegano (que en la actualidad solo se puede adquirir como fórmula tópica que replica el colágeno auténtico).
El colágeno vegano auténtico es una innovación más reciente, formado por compuestos de contenido proteico de los vegetales que, en conjunto, replican los aminoácidos presentes en el colágeno hidrolizado, lo que implica que puede suministrar al organismo una dosis directa de colágeno.
Con respecto a las opciones veganas, con el consumo de algunos vegetales, permite que fomenten la proliferación de este en nuestro organismo.
La combinación de antioxidantes, minerales y aminoácidosrepresenta un aporte beneficioso para el organismo, aunque no producirá un impacto tan potente como el colágeno procedente de animales, dado que su eficacia se basa en la habilidad de tu cuerpo para absorber los componentes que promueven el colágeno y generar efectivamente colágeno con estos.
A pesar de que aún se requieren más investigaciones, esta variante de colágeno vegano puede ser más positiva que la del colágeno que proviene de los vegetales.
Diferencias entre el colágeno vegano comestible y el tópico
En la actualidad solo se puede usar de manera tópica y continúa siendo costoso e inaccesible para muchos. Los posibles enfoques que hay entre ambos son:
Origen y composición
- El colágeno vegano comestible que viene de las algas, hongos o péptidos de plantas y el colágeno tópico que es de origen animal o sintético (sérum/cremas).
Mecanismo de acción
- El vegano comestible estimula la producción natural de colágeno a través de los nutrientes como es el caso de los aminoácidos y la vitamina C.
- Por otro lado, el tópico básicamente actúa de forma superficial en la epidermis, con poca absorción, ya que el colágeno posee moléculas de menor tamaño.
Eficacia y absorción
- El colágeno ingerido es metabolizado y se distribuye en los tejidos.
- El tópico es considerado como una “hidratación superficial” debido a sus efectos temporales.
Público objetivo
- Personas con estilo de vida vegana, personas con alergias o preferencias éticas se irán por la opción comestible, mientras que aquellos que buscan hidratación inmediata se decidirán por el tópico.

¿Cómo evitar pérdidas de colágeno?
Como ya hemos dicho antes, el colágeno es una de las proteínas que más abunda dentro del organismo. Este cumple un papel muy importante en la estructura, elasticidad y firmeza de la piel, así como en la salud de articulaciones, huesos, uñas y cabello.
A partir de los 25 a 30 años, la producción natural de esta proteína va disminuyendo, por lo que entonces se empieza el proceso de envejecimiento prematuro, apareciendo flacidez, arrugas, entre otros problemas.
Existen algunas prácticas que se pueden llevar a cabo para retardar el envejecimiento prematuro y que se debe tener en cuenta:
- No Fumar
- No consumir exceso de azúcares refinados
- Evitar la excesiva exposición al sol (aunque el sol es imprescindible para la vitamina D)
- Llevar una alimentación rica en nutrientes Pro-colágeno con proteínas de alta calidad, frutas y vegetales ricos en antioxidantes, y grasas saludables, así como otros nutrientes.
- Consumir suplementos de colágeno hidrolizado, que bien pueden ser de tipo I y III (para piel y articulaciones)
- Evitar el estrés crónico, procurando tener prácticas saludables como la meditación o el ejercicio controlado
- Incluir diariamente el cuidado de la piel con productos y tratamientos adecuados (skincare, tratamientos profesionales)
- Mantener hábitos saludables como, la hidratación correcta bebiendo 2 litros de agua al día, haciendo ejercicio regular de fuerza y dormir entre 7 a 8 horas diarias.